¿Qué hacer en Bangkok?
Visitar Krung Thep Maha, como llaman los locales a la capital de Tailandia, es sin duda una experiencia que no vas a olvidar. Las civilizaciones que han poblado esta zona han moldeado su aspecto a lo largo del tiempo y han dejado como legado una bonita amalgama de colores y culturas que juntas conforman la silueta de esta ciudad.
Qué ver en Bangkok
Durante tu circuito Bangkok y Phuket tendrás la oportunidad de visitar los monumentos más importantes y zonas con un carácter único. Para empezar, te recomendamos que te adentres en el Palacio Real, uno de los recintos más visitados de la ciudad. El rey Rama fue el que encomendó la construcción de esta zona en el siglo XVIII, momento en el que la antigua capital, Ayutthaya, fue saqueada durante la guerra con los birmanos. Llega pronto para no encontrarte demasiada gente y empieza a explorar el templo del Buda Esmeralda, considerado el protector del país. Sigue por Phra Mondhop, un magnífico edificio decorado con coloridos mosaicos y con un increíble suelo de plata pura. En el templo de Viharn Yot podrás admirar el tesoro más antiguo del lugar, el trono de Ramkhamhaeng. Si te gustan los edificios budistas pero no tienes tiempo de hacer un viaje a Camboya, puedes admirar una miniatura del majestuoso templo de Ankor Wat. Recuerda que para entrar dentro de los templos que encontrarás debes vestir de forma adecuada, cubriendo hombros y rodillas.
Seguimos este recorrido por Wat Pho, o templo del Buda reclinado. Aquí podrás admirar más de 1000 estatuas de buda, las pagodas doradas y las cuatro impresionantes estupas de 42 metros de altura. En la otra orilla del río Chao Praya verás el reflejo del impresionante Wat Arun, uno de los templos más grandes de Tailandia. Sus vistas durante la puesta de sol son absolutamente impresionantes.
Pero no todo son monumentos, ya que la mejor manera de conocer Bangkok es deambulando por sus calles. Una de las zonas más interesantes para hacerlo es Chinatown, una de las más antiguas y con más vida de la ciudad. Entra en el Wat Tramit para sorprenderte con la estatua de oro macizo más grande del mundo, que pesa la friolera de 5 toneladas. Camina por Thanon Yaowarat para degustar la comida más exótica o adéntrate en el mercado de Sampeng para encontrar absolutamente todo lo que te puedas imaginar: desde aparatos electrónicos, ropa a precio de ganga o joyas de lo más originales. Dentro del barrio se encuentra Little India, una calle corta en la que se encuentra una pequeña comunidad Sikh. No te olvides de acercarte a uno de los mercados flotantes que se encuentran en las inmediaciones de Bangkok y se alzan como un vivo reflejo de cómo la situación geográfica de la capital en un delta ha influido en la vida de sus habitantes. Uno de los más populares es el de Damnoen Saduak, a 100 kilómetros del centro y en el que te podrás subir a una pequeña barca de madera mientras los vendedores pasan por tu lado vendiendo distintos productos, desde agua de coco, fruta fresca e incluso un plato de fideos.