¿Qué ver en Barcelona?
Uno de los lugares que no hay que ver en Barcelona es su casco antiguo. En él se halla el barrio Gòtic, con monumentos como la catedral, erigida entre los siglos XIII y XV y con una fachada neogótica, o la iglesia de Santa María del Pi, embellecida con un espectacular rosetón gótico, y que fue el edificio más alto de la ciudad hasta el siglo XIX. También merecen una visita la plaza del Rei, una de las pocas que conservan su trazado medieval, y en cuyo subsuelo pueden admirarse los restos de la Barcino romana; la plaza de Sant Jaume, que alberga el Ayuntamiento y la Generalitat de Catalunya; la evocadora plaza de Sant Felip Neri, en la que Antoni Gaudí asistió a su última misa, y el antiguo barrio judío o Call, que acoge una casa romana y una de las sinagogas más antiguas de Europa.
En el barrio de Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera, también perteneciente al distrito de Ciudad Vella, encontramos el Palau de la Música Catalana, un referente del modernismo proyectado por Lluís Domènech i Montaner, y la basílica de Santa Maria del Mar, construida entre 1329 y 1383 e hito del gótico catalán. Junto a la misma, se despliega el monumento del Fossar de les Moreres, que recuerda a los catalanes que murieron durante el asedio de Barcelona en 1714, durante la guerra de Sucesión. A poca distancia, se puede visitar gratuitamente El Born Centre de Cultura, con vestigios de un barrio del siglo XVIII ubicados en los cimientos de un antiguo mercado. Muy cerca, abre sus puertas el Museo Picasso, que reúne 3.500 obras del genial artista malagueño.
Ciutat Vella también da cabida a uno de los lugares más atractivos y populares de Barcelona: Las Ramblas, un paseo ubicado entre la plaza de Catalunya y el puerto de Barcelona. En sus aceras se pueden encontrar cafeterías, quioscos, puestos de venta de flores, museos, estatuas humanas, pintores, mercadillos, el Teatro del Liceo, el mercado de La Boqueria o de Sant Josep, los pórticos de la plaza Reial y otros muchos reclamos que le han valido a esta pintoresca calle recibir los halagos del mismísimo Federico García Lorca. Al otro lado de Las Ramblas, se halla el barrio del Raval, donde es posible admirar el impresionante Palau Güell, una de las primeras creaciones de Gaudí, el antiguo hospital de la Santa Creu o el monasterio de Sant Pau del Camp, el principal ejemplo de arquitectura románica que se conserva en este municipio.
Otro lugar que hay que conocer en Barcelona es la montaña de Montjuïc. Presidida por el castillo de Montjuïc, cuenta con jardines como los de Mossèn Costa i Llobera, Joan Maragall, Joan Brossa y Laribal. También exhibe algunos de los escenarios que albergaron los Juegos Olímpicos de 1992, como el Estadio Olímpico Lluís Companys, el Palau Sant Jordi y las piscinas Bernat Picornell. Entre los museos que hay en Montjuïc, habría que citar el Museo Nacional de Arte de Cataluña, depositario de la colección de pintura románica más importante del mundo; la Fundación Joan Miró, el CaixaFòrum, el Museo de Arqueología de Cataluña, el Museo Etnológico y de Culturas del Mundo, el Museo Olímpico y del Deporte y el Poble Espanyol, un recinto con talleres de artesanía, restaurantes, reproducciones de edificios emblemáticos de toda España y hasta un tablao flamenco que abre por la noche.
Otro lugar de interés en Barcelona es el parque de la Ciutadella. Con una superficie de más de 17 hectáreas y emplazado en los terrenos ocupados por una fortaleza militar entre 1716 y 1868, fue el marco donde se celebró la Exposición Universal de 1888. Entre sus mayores alicientes, descuellan el Palacio del Gobernador, la sede del Parlament de Catalunya, la escultura El Desconsol, de Josep Llimona, y el zoo de Barcelona. No muy lejos de allí, se alza el icónico Arc de Triomf, de factura neomudéjar.
Sea como fuere, la atracción estrella de Barcelona es, sin duda, la Sagrada Familia, obra cumbre de Gaudí y uno de los elementos más reconocibles del skyline barcelonés. Tras su finalización, prevista para 2026, será la segunda iglesia más grande del mundo después de la de San Pedro del Vaticano, en Roma. Otras obras gaudinianas de Barcelona, son el Park Güell, un proyecto de ciudad jardín inconcluso; la Casa Vicens, en la calle de las Corolines, La Pedrera (o Casa Milà) y la Casa Batlló, estas dos en el paseo de Gràcia. Todas ellas forman parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, una distinción que también posee el Recinto Modernista de Sant Pau, próximo a la Sagrada Familia.